pero no, por suerte faltan unas horas para que termine... haciendo un pequeño recuento han sido más las bajas que otras cosas, siguen ahí los amigos de siempre y he conquistado algunas lugares, pero las perdidas han sido mayores... sigo, queriéndolo, perdiendome en lo impersonal de la red, en los rincones oscuros y morbidos de la ciudad, coqueteando con las drogas como siempre... no me arrepiento, he perdido esa costumbre, sólo me resta, como otras veces, mirarme un poco y decirme cuanto falta para llegar a puerto... para ser como el viajero de Loynaz al que no espera nadie...
sigo contando en reversa, sigo descontando minutos, sigo deseando que se acabe...
y aquí sigo...
sigo contando en reversa, sigo descontando minutos, sigo deseando que se acabe...
y aquí sigo...